Un monumento en Lisboa - Tortuga
Administración Enlaces Contacto Sobre Tortuga

Un monumento en Lisboa

Jueves.9 de julio de 2020 494 visitas - 1 comentario(s)
Agustín, Velloso, Tortuga. #TITRE

Por cuestiones laborales, me encuentro en Lisboa.

La imagen de las dos chicas paseando por delante del memorial y de los tres niños que nadan al fondo a la derecha hace pensar que las guerras terminadas hace muchos años apenas sirven para que los Santos Inocentes se refresquen y se distraigan un rato sin prestar atención alguna a lo que no son sus juegos y probablemente sin reparar en que éstos son a costa de los muertos. Quizás algunos están enterrados ahí.


Monumento A os Combatentes do Ultramar

O monumento é constituído por um lago com uma estátua no seu meio. No ano 2000, ao longo do Forte do Bom Sucesso, foram afixadas lápides onde figuram os nomes dos caídos no cumprimento do dever.

Para que se pudesse conceber o Monumento houve que definir objectivos, sendo os mais importantes, os seguintes:

Cumprir um acto de justiça, de homenagem àqueles que, como Combatentes, serviram Portugal no ex-Ultramar português;
Exercer uma acção cultural e pedagógica de exaltação do amor a Portugal;
Traduzir de uma forma simples, mas duradoura e pública, o reconhecimento de Portugal a todos esses combatentes

Nota: los comentarios podrán ser eliminados según nuestros criterios de moderación.
  • Un monumento en Lisboa

    9 de julio de 2020 17:08, por Agustín

    Me escribe mi hija adolescente desde Madrid:

    En España también habrá monumentos sobre muchas guerras, algunos sí los verán, pero los niños no tienen ni idea de lo que significan, sólo quieren jugar, las chicas que pasan por allí no saben apenas qué es lo que están viendo, pero incluso si lo saben no les importa.

    Le respondo:

    Todos los países celebran sus guerras cuando ganan y las ocultan cuando las pierden.

    Cada país levanta monumentos a sus caídos de guerra.

    Con suerte más tarde los niños juegan en ellos y los mayores se hacen fotos, pero lo más probable es que los perros se meen encima o cerca si no tienen una valla de por medio.

    Su labor "pedagógica" nunca jamás alcanza a explicar las verdaderas razones de las guerras, de los crímenes de guerra, de sus negocios, de sus bendiciones y del sufrimiento de las víctimas.

    Tampoco incluyen el testimonio de los que han participado de alguna manera, como no sea para justificarla o para apoyar la siguiente.

    Quizás por eso, en cada generación, o cada poco tiempo, siempre habrá quien promueva la guerra, quien la apoye, quien se aliste, quien pierda la vida...

    Así a pesar del sentido común.

    Por eso se dice desde antiguo:

    "Dulce bellum inexpertis"

    Responde este comentario