La guerra, y la preparación para la guerra, ha sido uno de los mayores factores de destrucción ambiental a lo largo de la historia. Además, a día de hoy, las fuerzas armadas son el mayor agente contaminante en nuestro planeta y el menos reglamentado.
Por todo ello, en un momento en el que, cada vez más, lo sociedad demanda un giro radical en las políticas ambientales y buscar una paz duradera “ en la tierra” y una paz duradera “con la tierra”, el papel del ejército (...)