También en agosto hubo concentración contra las guerras en Elx

Tortuga.

Pocas pero irreductibles. A causa de las fechas veraniegas y de que solo se había convocado de forma interna, sólo fueron una decena de personas (más algún que otro interesado que se detuvo a informarse y a participar brevemente) quienes mantuvieron viva, una vez más, la concentración que todos los días 24 de mes convoca Elx per la Pau para pedir el final de todas las guerras. El acto esta vez tuvo lugar en la Plaça i Baix de Elx.

Esta concentración se celebra desde hace ya casi un año y medio y, en ella, cada mes, se pide el cese de la guerra de Ucrania, del genocidio de Palestina y se recuerdan esas otras muchas guerras que no salen en la televisión.

Por ello, un mes más, se recordó a toda la gente que está sufriendo en los conflictos de Ucrania y Palestina. En la lectura de los manifiestos volvimos a sentirnos tristes y avergonzados al recordar que estas tragedias, una de ellas un genocidio sin precedentes en el siglo XXI, suceden gracias a las políticas de nuestros gobiernos occidentales quienes no dejan de alimentar las respectivas situaciones con envío de armamentos, financiación económica, colaboración en el rearme y la logística tanto de Ucrania como de Israel. Es realmente lamentable que el gobierno español, por su inacción, cuando no por su cooperación en el comercio de armas, sea también cómplice del asesinato de decenas de civiles inocentes en Gaza y de la limpieza étnica que el estado de Israel está perpetrando en Cisjordania. Nos aflige profundamente como personas que creemos en la justicia y en la Paz.

Por ello, seguiremos incansables levantando nuestra voz contra tanta ignominia; en defensa de todas las víctimas de toda guerra y en solidaridad con quienes se esfuerzan en que la paz justa pueda darse. Por eso os esperamos en nuestra próxima convocatoria, que tendrá lugar el próximo 24 de septiembre. Es urgente parar la carnicería. Cuantas más personas seamos, antes podremos lograrlo.