Mahmoud Mohamed Taha: el “Gandhi” de Sudán

Mahmoud Mohamed Taha (1909 - 18 de enero de 1985) fue un teólogo pacifista y una importante figura política sudanesa. Taha desempeñó un papel prominente en la lucha de Sudán por la independencia frente a Gran Bretaña, y fue fundador del Partido Republicano Sudanés. Fue notable por su defensa de la reforma liberal dentro de la sociedad sudanesa y dentro del Islam mismo. El régimen del presidente sudanés Gaafar Nimeiry ejecutó a Mahmoud Mohamed Taha por sus opiniones.

Sus orígenes

En 1909 Taha fue llevado a Rufa’a, una pequeña ciudad en la orilla este del Nilo azul, en Sudán central. Cuando su madre, Fatima bit Mahmoud, falleció alrededor de 1915, su padre, Muhammad Taha, tomó a sus niños y se trasladó a al-Higailieg-Higailieg, una aldea próxima donde toda la familia trabajó en la agricultura. Muhammad Taha padre murió alrededor de 1920, dejando huerfanos a sus cuatro hijos que serían acogidos por su tía en Rufa’a. La tía de Taha permitió que los niños continuaran su educación, y Taha completó sus estudios en el extremadamente competitivo sistema educativo de aquel tiempo. Se graduó en la escuela de la Universidad Conmemorativa de Gordon, hoy la Universidad de Ingeniería de Khartoum, en 1936. Después de un período corto en el servicio de ferrocarriles de Sudán, dimitió y empezó su actividad privada en 1941. Como participante activo en la lucha nacionalista por la independencia, desde el principio del movimiento a finales de los años 30, Mahmoud quedó insatisfecho con la participación de las élites musulmanas devotas educadas en esa lucha.

Taha y otros convencidos de sus críticas hacia el movimiento nacionalista, formaron el Partido Republicano en octubre de 1945. Las publicaciones de dicha organización reflejaron los fuertes movimientos liberales dentro del Islam (orientación islámica modernista), y del movimiento del secularismo. La política del partido de confrontación directa y abierta contra las autoridades coloniales condujeron a la detención y al encarcelamiento subsecuente de Taha en 1946. Lo condenaron a un año en prisión cuando él rechazó abstenerse de toda actividad política contra el gobierno colonial. Sin embargo, en respuesta a la protesta contra este montaje orquestada por el Partido Republicano, fue absuelto por el gobernador general británico y liberado tras cincuenta días de reclusión.

Taha no permanecería libre por mucho tiempo sin embargo. En el mismo año lo arrestaron, fue enjuiciado, y condenado a dos años de encarcelamiento por conducir una rebelión popular contra los Británicos en la ciudad de Rufa’a. Él describió más adelante este período crucial suyo en la prisión: "cuando entré en la prisión comencé a comprender que mi señor allí me puso y por lo tanto comencé mi Khalwah (aislamiento místico) con él". Fue durante estos dos años de encarcelamiento, y los tres años posteriores de aislamiento religioso auto-impuesto (khalwah) en su ciudad natal de Rufa’a, cuando Taha inició métodos de adoración islámica que le condujeron a una nueva comprensión del significado del Corán. Esos métodos de adoración eran principalmente el rezo y el ayuno a la manera (tarique) de Mahoma. Aunque Taha compartió la creencia musulmana común de que toda la revelación divina había terminado con el Corán, él acentuó el que los individuos devotos pueden recibir una comprensión aclarada de la palabra, y aprender de Dios directamente con su palabra, según lo revelado a Mahoma. En ayuda de esta discusión, él citó a menudo el verso 282 del segundo sura del Corán, que indica que Dios enseña a quién es piadoso y temeroso de Dios. Él también citó el hadith, que establece que la persona que actua de acuerdo con lo que sabe, será gratificado con el conocimiento divino de aquello que no sabe.

Difusión de la nueva filosofía

Al final de su período de aislamiento en octubre de 1951, Taha emergió con un nuevo concepto de la comprensión del Islam. Resumió lo que entendía en un libro que fue publicado en 1952 bajo el título de "Esta es mi trayectoria", o Qul Hadhihi Sabieli. El Partido Republicano entonces se transformó de partido político a organización dedicada a la propagación del concepto de Taha del Islam. Los miembros del partido que deseaban perseguir un papel político más secular se escindieron y articularon otros partidos políticos. Para los que permanecieron con el partido original, la organización se convirtió en un movimiento espiritual bajo la dirección de Taha.

Trás un período corto de servicio en la Compañía de Agua y Electricidad de Khartoum, Taha reasumió su actividad privada como ingeniero al principio de los años 50.
En 1955, momentos antes de que Sudán alcanzara la independencia, Taha publicó un libro titulado "Usus Dustour Como-Soudan", sobre sus ofertas para una constitución sudanesa. Llamó a una república presidencial, federal, democrática y socialista. Se opuso a cualquier tentativa de aplicar las leyes derivados de la Sharia islámica. Aplicar la Sharia significaba para él invitar a la desconfianza y la animosidad de los ciudadanos no musulmanes, o no arabes de Sudán. Una rebelión armada, que entró en erupción en 1955 en el sur de Sudán, inició un movimiento para exigir el control federal para apoyar al sureño SPLM durante la guerra civil.

Poco después la independencia, que fue concedida el primero de enero de 1956, se formó un comité para escribir el documento para una constitución, que se presentó para su adopción por el parlamento. Taha representó al partido republicano en ese comité. Algunos meses después dimitió de ese comité argumentando interferencia de la autoridad ejecutiva. Dicho comité produjo un manuscrito para la constitución que era derivado en parte de la Sharia, según lo deseado por los partidos sectarios religiosos tradicionales. Antes de que el manuscrito se poduiera adoptar por el parlamento, un golpe militar no sangriento tomo fuerza en noviembre de 1958. Todos los partidos, incluyendo el partido republicano, fueron disueltos. Taha escribió una carta al general Abboud, el jefe del nuevo régimen, aconsejándole que aplicara las ofertas de los republicanos para un gobierno democrático, socialista, yfederal, y junto a la carta incluyó una copia de su libro acerca de la constitución. Las recomendaciones de Taha fueron desechadas. Durante los primeros dos años del gobierno militar, Taha llevó a cabo conferencias públicas.

Sin embargo, sus ideas progresistas eran tan intolerables para los tradicionalistas religiosos que despidieron a tres estudiantes jóvenes del movimiento republicano del Instituto Islámico de Omdurman por propagar el concepto de Taha del Islam. Inmediatamente después de esto, se prohibió a Taha organizar conferencias públicas. Taha entonces transfirió sus actividades a las casas privadas de los miembros del movimiento y de sus más comprensivos amigos. Le negaron el acceso a los medios cuando intentó corregir alegaciones que él creía falsas. En medio del montaje de rechazo a sus movimientos seculares dentro del Islam Taha publicó su libro "El Islam" en 1960.

Tras el retorno de Sudan al multipartidismo parlamentario, Taha restableció el Partido Republicano para propagar sus llamamientos para la reforma social, política y religiosa con conferencias públicas, artículos periodísticos y libros. En 1966-67 publicó tres de sus libros más importantes: "Tarieq Mohammed", o "trayectoria de Mahoma", "Risalat Assalat", o "El mensaje del que reza"; y "Arrisala Atthaniya min Al-Islam", o "El segundo mensaje del Islam". Fué el primer hombre en proponer un diálogo directo para una coexistencia pacífica entre los estados árabes y el estado de Israel después de la "guerra de los seis dias" entre los árabes e Israel. Trató este asunto en sus libros "Mushkilat Assharq Al-Awsat", o "El problema del Medio Oriente", y "Al-Tahaddi Alladhi Yuagihu Al-Arab", o "El desafio encara a los Arabes", ambos publicados en 1967. Se opuso principalemente al nacionalismo egipcio de Gamal Abdel Nasser, así como a lo que él percibió como un uso primitivo del Islam en Arabia Saudita y contra el "Movimiento Musulmán de la Fraternidad" de otros países árabes, movimiento que él desdeñaba enormemente.

Los partidos sectarios predominantes junnto con el movimiento musulmán de la fraternidad gestaron una enmienda del artículo 5/2 de la constitución para expulsar a miembros comunistas del parlamento y disolver su partido en 1965. A pesar de su oposición al comunismo marxista, Taha se opuso vigorosamente a la disolución del partido comunista sudanés y consideró ese paso como el último suspiro de la democracia sudanesa.

En noviembre de 1968, Taha fue acusado de Ridda (apostasía), un crimen castigable con pena de muerte. Él rechazó aparecer en el juicio, invocando su derecho constitucional a la libertad de pensamiento y expresión. Sin embargo, el tribunal superior de las reglas islámicas de la Sharia de Khartoum, aprovechó su ausencia para investigar las alegaciones hechas por dos "profesores islámicos de la universidad" quienes acusaban a Taha de Ridda, y exigió desmontar su partido y su movimiento. El nuevo gobierno prohibió todos los partidos políticos, incluyendo el partido republicano.

Los republicanos durante el régimen de mayo, 1969-1983
Era absolutamente obvio desde el prinicipio que el nuevo régimen militar fue influenciado y apoyado por el partido comunista y por los nacionalistas árabes. Obtuvo una rápida ayuda de Egipto, así como del bloque socialista bajo dirección de la Union Sovietica. A pesar de esto, la presión de los republicanos facilitó, después de que el nuevo gobierno tomase el gobierno y declarase sus prioridades, lograr las metas de la revolución del pueblo sudanés de octubre de 1964. Uno de los primeros pasos que habían sido bienvenidos por Taha era la decisión para parar la guerra en el sur y la declaración de la búsqueda de una resolución pacífica del conflicto. Él vio en el régimen una etapa intermedia, probablemente para proteger a la gente sudanesa contra la Sharia islámica. Taha continuó propagando sus opiniones en cada lugar disponible hasta 1973 en que el régimen de Gaafar Nimeiry prohibió sus conferencias públicas. Taha mantuvo un acercamiento no-agresivo al régimen de Nimeiry, pero también evitó unirse a el. En lugar de esto, el movimiento continuó e intensificó sus esfuerzos para propagar su nueva ideología, lo cual fue tolerado inicialmente por el régimen.

El movimiento de liberación de la mujer

Durante la mayoría de los años restantes de su vida, Taha se limitó a dirigir las actividades de la organización para entonces conocida como los "hermanos republicanos", que incluyeron un número creciente de miembros femeninos. Los miembros masculinos y femeninos de la organización continuaron propagando el segundo mensaje del Islam a pesar de el hostigamiento de algunos funcionarios y miembros de las fuerzas de seguridad. Puesto que era crucial para Taha practicar lo que se predica, intentó establecer una comunidad que aplicase, lo más posible, los principios básicos de su visión del Islam. Como comunidad pequeña dentro de la sociedad sudanesa, los republicanos no podían poner en practica la ejecucion completa de sus creencias en la organización vigente del estado sudanés, pero se esforzaron por conducir sus vidas personales y organizar a su propia comunidad de acuerdo con dichas creencias. En concreto, la comunidad tuvo importantes éxitos en gran parte de la aplicación de los principios de igualdad entre hombres y mujeres, sin ninguna discriminación basada en argumentos sexistas. Las mujeres miembros participaron completamente en las actividades de todo el grupo, y eran a menudo líderes de los grupos activistas en los campus de la universidad y en parques y esquinas públicas en la calle - una práctica altamente polémica en la sociedad sudanesa patriarcal. Tal era el sello no sexista del movimiento, que cuando la dirección de la organización fue detenida sin cargos a mediados de 1983, cuatro mujeres estaban entre los detenidos.

La práctica del grupo en lo referente al matrimonio, fue ilustrativa de la determinación de los miembros para implementar sus reformas a la luz de las costumbres sociales prevalecientes.

Confrontación creciente con Nimeiry

Después de que las conferencias públicas de Taha fueran prohibidas en 1973, sus discípulos funcionaron con bastante dificultad ante la mayoria de las leyes de Nimeiry. Aunque sus actividades estaban siempre dentro de la ley, sus opiniones tendían a despertar la oposición de círculos religiosos y políticos tradicionales y fundamentalistas.

Sus opositores tuvieron algún éxito ocasional en la aplicación de varios mecanismos administrativos y ejecutivos para obstruir o limitar la eficacia de los republicanos. Frente al acceso negado a los medios, que eran propiedad del gobierno en aquella epoca, los republicanos tuvieron que preparar sus propias publicaciones y abrir canales poco ortodoxos para alcanzar al público. Tuvieron que recurrir, por ejemplo, al uso de las esquinas de la calle y de los parques públicos para dirigirse a quienquiera que estuviera dispuesto a pararse y a escuchar lo que tenían que decir. La policía intervino a menudo para romper esas reuniones públicas espontáneas, cargando contra los republicanos que conducían las reuniones, con acusaciones de "ruptura de la paz" y de "disturbio de la tranquilidad pública." Las protestas frecuentes de los republicanos contra esas infracciones de sus derechos constitucionales fundamentales fueron vanas.

A pesar de estas restricciones, los republicanos apoyaron el régimen de presidente Nimeiry durante los años 70 y en los primeros años 80. Su colaboración fue estrecha mientras el régimen mantuvo políticas de unidad nacional y se refrenó de aplicar la Sharia en detrimento de las mujeres y de los no-Musulmanes sudaneses. Los republicanos también creyeron que el régimen de presidente Nimeiry era preferible a la única alternativa disponible, una dictadura civil sectaria y fundamentalista. Solamente después de que la Sharia fue impuesta por los decretos presidenciales que comenzaron en agosto de 1983, la unidad nacional se resquebrajó entre el norte musulman y el sur no-musulman, y la instauración de políticas ásperas y represivas en todo el país, hizo a los republicanos declarar su oposición. Es decir, su oposición fue incitada por el cambio en la naturaleza y las políticas del régimen más bien que por la detención en 1983 de la dirección del grupo como tal.

El mismo Taha había sido detenido previamente junto con ocho líderes del grupo, durante un mes en 1976-77 y liberado sin cargos por publicar un libro criticando el movimiento Wahhabi de Arabia Saudí. También había sufrido personalmente cuál era el efecto de la intromisión total en sus actividades públicas desde 1973. El grupo aguantó esas restricciones y hostigamiento durante más de diez años con la anuencia del régimen del electo presidente Nimeiry.
La causa esgrimida para la detención a mediados de 1983 fué un folleto publicado por los republicanos. Dicho folleto criticaba lo que ellos percibián como un error del jefe de la seguridad del estado, que también era primer vicepresidente de la república, que incitó a los fundamentalistas islámicos al odio religioso y a la violencia contra los republicanos y contra los no-musulmanes sudaneses.

Retrospectivamente sin embargo, y a la luz de los hechos subsecuentes, parecería que por lo menos la continuidad de la detención de los líderes, e incluso de la orden inicial de detención, fue motivada por otras consideraciones.

Algunas semanas después de su detención, el presidente Nimeiry anunció su intención de imponer la ley Sharia. Si los republicanos estuvieran libres, debió pensar, se opondrían activamente a esa política, porque contravendría su posición mantenida desde hacía mucho tiempo de que debería haber una reforma radical de la Sharia antes de su puesta en práctica actual. Cuando esa política se materializó en una serie de promulgaciones que comenzaron en agosto de 1983, los republicanos empezaron una campaña de oposición, aún con su dirección detenida. A pesar de su oposición activa a la política del presidente Nimeiry de islamización impuesta, o quizás debido a esta oposición, este liberó a los todos republicanos el 19 de diciembre de 1984, después de aproximadamente diecinueve meses de detención sin cargos. Mas tarde llegó a ser evidente que esta liberación fue en realidad una trampa deliberada para implicar a los republicanos en los actos abiertos que las nuevas leyes convirtieron en ilegales. Esta liberación marcó el principio de la secuencia de eventos que culminaron en la ejecución de Taha cuatro semanas más tarde. A pesar de estar al corriente de esas intenciones, Taha asumió inmediatamente la responsabilidad de la campaña contra la política de islamización de presidente Nimeiry.

En el plazo de una semana de su liberación, el 25 de diciembre de 1984, la publicación del folleto "al-Tawafan-Tawafan de Hatha Aow" ("Esto o la inundación") constituyó la exigencía de la derogación de las nuevas leyes, y un alegato por la garantía de las libertades civiles democráticas bajo las cuales poder discutir los principios y el proceso de islamización.

La reacción inicial de la policía al prospecto fue confusa, debido a la reciente liberación total de los republicanos. Por otra parte, la lengua y el contenido suaves del prospecto en sí mismo, no facilitaban ninguna causa para las cargas serias a tenor de las leyes existentes. Algunos distritos de la policía arrestaron a algunos republicanos que se encontraban distribuyendo el prospecto con el cargo de ofensa de menor importancia a la "ruptura de la paz" bajo la sección 127 del nuevo código penal. En algunos casos, sin embargo, ciertos oficiales de policía intervinieron para detener a algún policía por arrestar a algún republicano sin causa justificable.

En este punto, el ministro de justicia del estado mandó a fiscales públicos a tres ciudades de Khartoum, de Omdurman, y del norte de Khartoum a imponer cargos de sedición, ataque a la constitución, incitación a la oposición ilegal al gobierno, y perturbación de la tranquilidad pública bajo las secciones 96, 105 y 127A del nuevo código penal de 1983, así como pertenencia a organización ilegal bajo la sección 20 del acta de la seguridad del estado de 1973. Con los cargos transformados de este modo en delitos graves, diez republicanos recientemente arrestados debían permanecer en custodia, pues los nuevos cargos no permitian ningúna libertad bajo fianza. El miércoles 2 de enero de 1985, trasladaron a cuatro republicanos que fueron arrestados y acusados en el distrito central de Omdurman, a juicio ante una de las cortes criminales especiales establecidas bajo un acto judicial de 1984.

Taha, acompañado por todos los republicanos tanto hombres como mujeres, marcharon en una demostración pacífica a dicha corte. El juicio fue aplazado, sin embargo, porque los cargos serios requerían la sanción especial del presidente de la república. El la tarde del sábado 5 de enero, Taha fue arrestado en su casa de Omdurman y acusado con la misma combinación de delitos. El la mañana del lunes 7 de enero, llevaron a Taha y los cuatro republicanos originales al jucio ante la corte criminal especial, después de que la sanción para el juicio fuera obtenida del presidente de la república. Los republicanos marcharon otra vez en una demostración pacífica que fue interceptada por la policía. Los republicanos reaccionaron con una sentada según las direcciones de Taha. Sin embargo, les obligaron a que se dividieran en grupos más pequeños siendo evidente que el obejtivo verdadero era distraer su atención de la corte. Es importante observar aquí que la sanción del presidente incluyó una orden para agregar la sección 458(3) del código penal a los cargos. Dicha sección autorizaba a la corte a imponer cualquier pena de Hadd, (pena de muerte prevista por la Sharia), sin importar la carencia de la disposición penal estatutaria. Esa sección violaba flagrantemente las provisiones expresas del artículo 70 de la constitución 1973, que todavía estaba en vigor en ese momento.

Dado que los cinco acusados boicotearon los procedimientos del juicio debido a su objeción a las leyes bajo las cuales la corte fue constituida y pretendía actuar, y también debido a sus objeciones a la capacidad de los jueces de dicha corte, la inconstitucionalidad de los cargos bajo seccion 458(3) del código penal nunca fue discutida en ninguún momento del proceso.

Cuando Taha anunció la decisión de boicot al proceso, improvisó una fuerte declaración de principios.

Juicio y ejecución

El juicio duró menos de dos horas. En el primer día, lunes 7 de enero, el único testimonio para el proceso, del oficial de policía que interrogó a los acusados después de su detención, fué examinado por el fiscal público y el juez. Su testimonio duró alrededor de una hora. El testigo mostró la única prueba para el procesamiento, el prospecto publicado por los republicanos el 25 de diciembre de 1984. Puesto que los acusados boicotearon el juicio, no hubo nada más antes de que el juez pronunciase sentencia, que éste pospuso para el día siguiente.

El martes, el 8 de enero, el juez leyó su sentencia, basada en gran parte en las declaraciones hechas contra los acusados por el oficial de policía que los detuvo. El juez indicó que había considerado los puntos de vista curiosos y poco ortodoxos del Islam que tenían los acusados, que podían o no ser válidos. Según su conocimiento del Islam, el Coran puede revelar sus secretos a los hombres de piedad y diligencia. Sin embargo, según la sentencia, era un hecho constatado que los acusados difundieron mal esos secretos e ideas profundas entre el pueblo, y que dicha actividad podría excitar la agitación religiosa (fitnah).

Después de esta interpretación del pensamiento de Taha por parte del juez, Taha sugirió que el juez quizá tuviera el delito islámico de apostasía en mente. El juez entonces concluyó repentinamente el juicio declarando a los cinco acusados culpables de sedición, ataque a la constitución, incitación a la oposición ilegal al gobierno, perturbación del orden público, y pertenencia a una organización ilegal.

El razonamiento de la decisión fue relacionado con el delito de apostasía, aunque nunca se mencionó dicho delito por su nombre, mientras que los cargos reales fueron extraidos de las secciones 96, 105 y 127A del código penal y de la sección 20 del acta de la seguridad del estado. No hubo ninguna tentativa en los procedimientos por demostrar cómo, de la conducta de los acusados, podian deducirse estos delitos. Mientras que la violación de la sección 458(3) del código penal fue mencionada como uno de los cargos, la sentencia no hizo ninguna mención de dicha sección.

El juez dictó la pena de muerte para los cinco acusados bajo la sección 96 del código penal, y añadio una claúsula según la cual los acusados podrían ser perdonados si se arrepentían y retractaban de sus opiniones. Esto convenció a muchos de que el juez estuviera de hecho condenando a los acusados de apostasía, porque bajo la ley Sharia el arrepentimiento y la retractación de las opiniones del hereje, son argumentos para la suspensión temporal de un castigo. No había base para la suspensión temporal de un castigo en tales argumentos en lo referente a la sección 96 del código penal bajo el cual los acusados eran condenados.

En contraste con la corte en que se desarrolló dicho juicio, el tribunal de apelación especial que repasó el juicio se centró abundantemente en el cargo de apostasía, y lo especificó claramente por su nombre. El tribunal de apelación especial confirmó la sentencia de muerte para los cinco acusados por el delito de apostasía, así como las secciones especificadas de la tenencia penal del acto contra el código de seguridad del estado, y dado que Taha era persistente en su apostasía, el tribunal de apelación le negó la oportunidad de arrepentimiento y retractación de sus opiniones. La corte dictó que la pena de muerte de Taha debía ser ejecutada inmediatamente. Los otros cuatro acusados tendrían un plazo de un mes para reconsiderar su posición. Serían perdonados si se arrepentían.

La decisión del tribunal de apelación especial fue anunciada el martes 15 de enero, y el presidente de la república anunció públicamente su confirmación de la ejecución el jueves 17 de enero y que Taha sería dirigido para proceder con ella el viernes 18 de enero. Al igual que la corte del juicio inicial, el presidente Nimeiry basó su comunicado a la nación en la teoría de la apostasía de la ley Sharia, pero sin mencionar el delito por su nombre, cuando él confirmó la convicción en la justicia de pena de muerte para los cinco acusados. El presidente dictó que los otros cuatro acusados tuvieran solamente tres días para arrepentirse y a retractarse o serían ejecutados el domingo 10 de enero. Como el presidente Nimeiry hizo su comunicado de confirmación de la pena a través de la radio y la televisión nacionales en la tarde del jueves 17 de enero, todas las fuerzas de seguridad de la capital fueron puestas en estado de alarma. Mientras la policía y el personal de seguridad del estado urdian planes para la detención de los republicanos sin cargos, las fuerzas armadas tomaban la seguridad en y alrededor de la prisión central en el norte de Khartoum, donde estaba a punto de ocurrir la ejecución la mañana siguiente.

Movieron a las tropas paracaidistas dentro de la prisión, donde un helicóptero se mantuvo de noche para quitar el cuerpo después de la ejecución. En el amanecer el viernes, se montó la operación más grande de seguridad jamás emprendida alrededor de la prisión, las autoridades comprobaron identidades y observaron de cercas a varios cientos de personas que vinieron a la ejecución pública programada para las diez de la mañana. Cuando Taha fue llevado sobre las escaleras de la horca de acero roja, la capucha que cubría su cara fue quitada durante algunos minutos. Cuentan que examinó a la muchedumbre con una sonrisa antes de que la capucha fuera sustituida para la ejecución real. Después de la ejecución por horca, el cuerpo fue descolgado, puesto en un soporte, y cubierto con una vieja manta. Entonces fue llevado en helicóptero, que voló inmediatamente hacia un destino desconocido. Fue divulgado más adelante que el cuerpo fue enterrado en un agujero bajo el desierto al oeste de Omdurman.

Reprobación de los miembros del partido

Después de la ejecución de Taha en la mañana del viernes, a la que les obligaron a asistir, los otros cuatro republicanos condenados declararon su intención de arrepentirse y por consiguiente fueron perdonados y se les permitió salir libres el sábado 19. Su arrepentimiento fue grabado y mostrado en la televisión nacional en una tentativa de desalentar cualquier condolencia con los republicanos que pudieron conducir a una rebelión contra el régimen.

Acordando desmontar su organización y refrenarse en la propagación adicional de los puntos de vista de Taha, casi todos los cuatrocientos hombres y mujeres republicanos detenidos en Omdurman en la víspera de la ejecución fueron liberados la semana siguiente. Algunos Republicanos que fueron detenidos en otras ciudades a través del país y acusados formalmente con la misma combinación de delitos que Taha, fueron liberados tras la firma de un compromiso similar.

Consecuencias y ninguneo

Una sublevación popular derrocó al presidente Nimeiry seguida por un golpe de estado el 6 de abril de 1985, setenta y seis días después de la ejecución de Taha.
Tras el derrocamiento de Nimeiry y la promulgación siguiente de una nueva constitución transitoria en octubre de 1985, un nuevo juicio constitucional fue iniciado por la hija de Taha, Asma, y uno de los viejos republicanos condenados con él en el juicio de enero 1985. En este juicio los demandantes solicitaron del Tribunal Supremo del Sudán poner las convicciones a un lado y anular sus sentencias, basandose en numerosas objeciones constitucionales y procesales a ese juicio. El abogado general del gobierno transitorio hizo una declaración oral ante el Tribunal Supremo para que el juicio de enero 1985 fuera declarado totalmente ilegal, ya que como abogado del gobierno actual, él no tenía nada decir en defensa de ese juicio.

Sin embargo, el Tribunal Supremo pidió una respuesta escrita detallada de la petición oral. Después de considerar toda la evidencia disponible y las opiniones de ambos lados, el Tribunal Supremo dictó que el juicio, los procedimientos de la confirmación, y la ejecución de Taha eran todos nulos y sin efecto. En un largo juicio el 18 de noviembre de 1986, el Tribunal Supremo discutió detalladamente las numerosas irregularidades del episodio entero, incluyendo violaciones claras de las salvaguardias y derechos fundamentales constitucionales garantizados por las propias leyes islamicas de 1983.

Las opiniones de Taha - incluyendo aquellas con respecto a la extensión del conocimiento divino dado a la humanidad después y más allá de la muerte de Mahoma - se consideran sediciosas en teología Sunni según lo manifestado en las escuelas teológicas de Hanafi, Maliki, Shafi’i y Hanbali. Aunque grandes partes de Sudán del norte han sido testigos recientemente de un renacimiento islámico entre la juventud, la inspiración teológica de este renacimiento proviene del Islam tradicional en lugar de de los puntos de vistas de Taha.

Comentario en la web deDaniel Pipes

Para ver una indicación de esto, obsérvese el pensamiento original del teólogo sudanés Mahmud Mohammed Taha (1909-85). Taha construyó su interpretación sobre la división en dos del Corán. Los versos iniciales fueron trasmitidos cuando Mahoma era un profeta sin poder, residente en La Meca, y tienden a ser cosmológicos. Los versos posteriores fueron trasmitidos cuando Mahoma era gobernador de Medina, e incluyen muchas normas específicas. Estas órdenes sirvieron eventualmente como sustrato de la Shari’a, o ley islámica.

Taha argumentaba que las normas coránicas específicas sólo se aplicaban a Medina, no a otros tiempos y lugares. Él esperaba que los musulmanes modernos dejaran a un lado éstas y vivieran según los principios generales impartidos en La Meca. De haber sido aceptadas las ideas de Taha, la mayor parte de la Shari’a habría desaparecido, incluyendo las provisiones desfasadas concernientes a la guerra, el robo y las mujeres. Los musulmanes podrían entonces modernizarse con soltura.

Incluso sin aceptar un gran esquema como el propuesto por Taha, los musulmanes ya están dando pequeños pasos en la misma dirección. Los tribunales islámicos del reaccionario Irán, por ejemplo, han roto con la tradición islámica y ahora permiten a las mujeres el derecho a pedir el divorcio y conceden la misma indemnización por un cristiano asesinado que por un musulmán asesinado.

Como esto sugiere, el islam no está atascado. Pero se necesitan grandes esfuerzos para ponerlo en marcha otra vez.