Los militares españoles congelan su semen en Alacant - Tortuga
Administración Enlaces Contacto Sobre Tortuga

Los militares españoles congelan su semen en Alacant

Lunes.26 de mayo de 2008 478 visitas Sin comentarios
Hacen bien; posiblemente sus hijos e hijas serán antimilitaristas #TITRE

Doce militares en misiones en el extranjero congelan su semen en Alicante para asegurar su descendencia

Una docena de militares españoles destinados en Afganistán, Líbano y los Balcanes ha congelado muestras de semen en el Instituto Bernabeu de Alicante para preservar su descendencia si sufren una merma de su fertilidad e, incluso, para posibilitar el embarazo de su pareja en caso de fallecimiento.

El director del grupo Instituto Bernabeu, Rafael Bernabeu, reveló que los militares en el exterior son uno de los colectivos profesionales que, teóricamente, presenta más riesgo de poner en peligro su descendencia, por lo que hay un número creciente de miembros que apuestan por esta ’custodia seminal’ realizada en el centro.

La mayoría de los donantes son mandos intermedios u oficiales que sobrepasan los 30 años, que tienen un proyecto familiar ’definido’ y quieren asegurarse tener hijos en un futuro.

El primer caso de un soldado que apostó por la congelación de su semen en la clínica de Alicante ocurrió antes de participar en la primera guerra de Irak, en 1990, y, desde entonces, hasta doce militares ha hecho lo propio antes de ser destinados a misiones en Afganistán, Kosovo, Bosnia y Líbano.

Bernabeu indicó que, afortunadamente, hasta el momento no ha habido ningún caso que haya hecho necesario descongelar estas muestras para su uso.

Para este servicio, los militares tienen que firmar previamente ante notario un documento de fe pública de consentimiento informado en el que precisen qué fin quieren dar al semen y en qué supuestos, por ejemplo si desean inseminar a su mujer con fines reproductivos en caso de muerte.

La actual legislación prevé que el almacenamiento y utilización de los espermatozoides congelados a -196 grados centígrados se pueda prolongar durante toda la vida del varón, y sólo expire seis meses después del fallecimiento.

Bernabeu prevé que haya un auge de este procedimiento para la congelación de semen en colectivos con ’riesgo vital’, como también pueden ser los bomberos, dado que afirma que se trata de un proceso ’indoloro, no complejo y poco gravoso económicamente’.

El responsable del Instituto Bernabeu recordó que el primer intento de congelar semen se remonta al siglo XIX cuando en 1876 en la ciudad italiana de Pavía en plena guerra de independencia contra los austríacos, cuando el abate y fisiólogo italiano Lazaro Spallanzani trató de salvaguardar los espermatozoides de los militares transalpinos en polvo de nieve.

De esta manera buscaba realizar su contribución patriótica para inseminar a las mujeres cuyos esposos fallecieran en el campo de batalla.

Además de estos colectivos, los especialistas recomiendan la congelación de semen para garantizar la fertilidad a miembros de profesiones que ven condicionada su descendencia a la escasa presencia por largo tiempo del varón en el hogar familiar, como podrían ser los marinos mercantes o los diplomáticos en otros países.

También para aquellos hombres que padecen enfermedades que van a precisar de terapias médicas agresivas que pueden conllevar una pérdida o alteración de la calidad del semen, como los pacientes oncológicos, reumáticos, enfermos de hepatitis o que sufren de patologías del intestino grueso.

El Instituto Bernabeu creó su primer banco de semen en el año 1985 y actualmente almacena más de 2.000 muestras en los bancos que tiene repartidos por las ciudades de Alicante, Benidorm, Elche y en Cartagena, la mitad de ellos guardada ’en custodia’ y el resto procedente de donaciones, añadió el director del centro alicantino.

Entre los logros médicos conseguidos por el centro alicantino también destacan los primeros y únicos casos de embarazo conseguidos con espermátidas en España, además del primer nacimiento mundial, en el verano de 2004, de una niña libre de padecer ceguera hereditaria (retinosquisis) y el primer nacimiento mundial, en febrero de 2006, de un niño libre de padecer Síndrome de Marfan, según fuentes de la institución sanitaria.

Terra.es