Adiós
Esta es la tierra, donde el sufrimiento es la medida de los hombres. Dan pena los condes con su fiel faisán y los cobardes con su fiel lamento.
La belleza nos sirve de tormento y la injusticia nos concede el pan. Un día brindaréis por los que habrán convertido el dolor en fundamento.
Los que vivimos para dar alcance a tan inmensa luz que hoy no podría un dios mirarla sin quedarse ciego,
aún tendremos que agotar el lance: arrojar al silencio la agonía como quien tira el corazón al fuego. (...)