Bueno, esta despedida y cierre nos deja a unos cuantos con perspectivas peores que la de morir de hambre en un guetto, ser gaseado en un campo de concentración o tener una imagen pública vinculada a una película tan mala como “La lista de Schindler” (’si lo que se le hizo’, etc.). Dado mi masoquismo, para mí no es mala perspectiva; y, por otro lado, lo dicho, alguien tendremos que dejar de convertirnos para que se cumpla la profecía del cerco sobre Israel y contar entre los muertos de la tribulación, etc.
De todas formas, a mí también me gustaría dejar una cita (...)