Entrevista a Bernd Schuster - Tortuga
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Entrevista a Bernd Schuster

Jueves.29 de mayo de 2008 826 visitas - 1 comentario(s)
Diagonal #TITRE

Original


“Con el Madrid de los galácticos el fútbol dejó de ser la primera opción, y se hizo daño”

JACOBO RIVERO

En un hueco antes de disfrutar de su otra pasión deportiva, el hockey sobre hielo, y en vísperas de la consecución del título de Liga, conversamos con Bernd Schuster, entrenador del Real Madrid y flamante campeón de la Liga 2007-2008.

Formado en la calle, Schuster comenzó en el equipo de su barrio augsburgués para pasar, con 16 años, al FC Augsburg, con el que estuvo dos temporadas y fue campeón de Baviera. Dos años antes, en 1974, Alemania se había proclamado campeona en el Mundial del que era anfitriona, en una final contra la ‘Naranja Mecánica’ de Neeskens y Cruyff, y en la que jugaban en la selección germana Berti Vogts, Beckenbauer, Müller...

DIAGONAL :¿Cómo vivió ese momento ?

BERND SCHUSTER : Era muy joven todavía. Las dos selecciones estaban quizá en su mejor momento, era como un Bayern de Múnich contra un Ajax de Ámsterdam. Dos equipos de una calidad impresionante. Mi ídolo era Beckenbauer, creo que fue el primer Mundial que viví con auténtica intensidad, porque antes había sido el de México, pero no era tan consciente. El último partido, con el 2-1 para Alemania, fue una final preciosa.

D. : Aquel Mundial llegaba en un momento especial, treinta años después del final de la II Guerra Mundial, veinte después del primer Mundial ganado por la República Federal Alemana, y con la participación de la República Democrática Alemana. ¿Qué significó para el país?

B.S. : Fue algo muy importante, con una de las mejores generaciones de jugadores que ha tenido Alemania. Yo todavía no tenía muy claro que en el futuro también fuera a estar allí, como aquellos futbolistas, pero sí que veía a mis ídolos. Para mí, como joven, era muy impresionante.


D. : Holanda practicaba el ‘fútbol total’ : todos atacaban y todos defendían... ¿Sigue vigente ese modelo?

B.S. : Era un fútbol muy vistoso, muy ofensivo, muy típico de Holanda, que hasta hoy ha mantenido este tipo de jugadores, como Cruyff, Neeskens o Rob Rensenbrink. Pero que luego ha sido el fútbol de Marco Van Vasten, Gullit, Koeman, Rijkaard, etc. ; incluso, más recientemente, de Van Nistelrooy o Davids. Holanda siempre ha sido un país con un tipo de jugador especial, muy atractivo.

D. : ¿Cuál era el estilo alemán?

B.S. : El alemán era temido por su aspecto físico, unos equipos muy duros, con ritmos altos los 90 minutos, sin desfallecer. Luego tuvimos épocas más técnicas, con Rainer Bonhof, Gerd Müller o Stilike, y a continuación llegó nuestra generación con Matthäus, Littbarski, Völler. Después de la de Beckenbauer, yo creo que fue la mejor generación. Somos un fútbol diferente del holandés, pero al final nos llevamos más títulos...


D. : ¿Ese estilo se mantiene?

B.S. : Sí, porque es una virtud que tenemos en Alemania, y que creo que siempre la vamos a tener. Lo que sí que hemos perdido un poco son esos jugadores técnicos, que tuvimos generaciones y generaciones. Tuvimos un estancamiento y ahí es donde estamos sufriendo un poquito más ahora.

D. : ¿Y cómo fue su llegada al Barça, qué se encontró aquí?

B.S. : Yo no conocía casi nada. Sólo había jugado antes dos veces contra equipos españoles. Una contra el Real Madrid, en un amistoso en Bélgica con el Colonia, que fue mi equipo en la primera división alemana, y luego un trofeo Gamper en Barcelona, en el que jugamos la final contra el Barça y perdimos en la prórroga. Eran las dos únicas experiencias que tenía, y la verdad es que vine con poca información. Tenía ganas de conocer otro país, de conocer otro ambiente. Lo más importante para mí era que quería jugar al fútbol y triunfar, quizá lo más positivo es que la mentalidad española conectó muy bien con mi fútbol, y también al revés, mi fútbol gustó mucho a la gente, y por eso sigo hoy aquí.

D. : Socialmente, ¿qué le pareció?

B.S. : Un país bastante diferente, en Alemania estábamos más avanzados, a pesar de haber perdido una guerra. Pero luego me he dado cuenta que este país se ha ido recuperando muy rápido en muchas cosas, ha avanzado a un ritmo muy fuerte.

D. : Antes hablaba de estilos de fútbol, de Holanda o Alemania, ¿cuál sería el modelo propio del Real Madrid?

B.S. : Lo del Madrid es muy claro, yo lo vi cuando jugaba aquí. La historia del club es que siempre ha intentado tener los mejores jugadores del mundo, durante muchas generaciones.

Entonces aquí sabes que es necesaria una cierta forma de jugar, que tiene que ser vistosa, que guste a la gente y que además sea efectiva, que consiga ganar títulos. Juntar esas cosas es importante, hay que tener éxito y a la vez practicar un fútbol que guste a la gente. Puede ser con un alemán, con un brasileño, o con un holandés, pero lo que se busca es gente que tenga esa filosofía para triunfar en el Real Madrid.

D : Y en esa filosofía, ¿dónde encaja el jugador-márketing, el modelo de equipo ‘galáctico’ que introdujo Florentino Pérez?

B.S. : Ahí se cambió la mentalidad del futbolista. El fútbol dejó de ser la primera opción y lo fue el márketing, y se hizo daño. Lo más importante es el futbolista, que tiene que conseguir títulos, y a la gente, al club y al público, sobre todo a este último, le da igual saber cuántas camisetas se venden. El público quiere buenos jugadores, que jueguen bien, que piensen en el equipo. Ésa es su prioridad, y no la publicidad.

D. : ¿Y no cree que, actualmente, existe una distancia enorme entre el futbolista y el aficionado que antes no era tan grande?

B.S. : Sí, pero la vida cambia y sigue, introduciendo cosas que uno no puede parar. Por supuesto que en nuestra época nos sentíamos más jugador, nos dedicábamos al fútbol y no teníamos otras cosas. Hoy para el jugador, sobre todo en los equipos grandes, todo se abre mucho más, pero es algo que no se puede evitar.

D : La Premier League tiene actualmente un rendimiento económico y un reconocimiento por parte de los aficionados al fútbol superior a la Liga o al Calcio. En su opinión, ¿a qué se debe este éxito del fútbol inglés?

B.S. : Yo creo que el fútbol inglés tiene una mentalidad propia. Lo que ocurre es que también ha cambiado mucho. Se ha invertido muchísimo dinero y así se ha producido un cambio enorme, sobre todo por la introducción masiva de jugadores extranjeros, que son mayoría en los tres o cuatro equipos más importantes de la Premier. Para mí eso no significa que sea la mejor liga, pero sí la hace muy competitiva.

D. : ¿Cree que hay alguna competición que sea mejor que otra?

B.S. : No, creo que hay dos o tres por encima del resto. Principalmente la liga española y la inglesa, que están dominando en Europa, y que tienen un nivel muy alto de competición. Aquí, en el conjunto de equipos, existe un nivel de competición mucho más alto que en la liga inglesa, donde desde el cuarto puesto para abajo no hay excesivo nivel. Sobre el modelo de fútbol, insisto en que la influencia de los jugadores y entrenadores extranjeros ha sido enorme en Inglaterra.

D. : El fútbol proyecta en ocasiones una imagen de violencia, con peleas entre hinchadas, actitudes racistas y fascistas en algunos grupos de aficionados. ¿Usted cree que es reflejo de la sociedad, o que es algo que se ha fomentado desde los clubes?

B.S. : Creo que cada vez se está mejorando más para que la gente pueda ir tranquila a ver un partido de fútbol. Siempre hay cosas desagradables. Yo aquí me siento bastante seguro, aunque a todos nos gustaría estar más a gusto, abrir los campos, quitar las redes de protección de los fondos. En otros países la cuestión es más dramática, como en Italia. Son cosas que hay que cambiar, que pasan también fuera del estadio. Es verdad que no existe un control de este fenómeno, pero cuando vamos a Turquía o a Grecia hay una violencia enorme, y entonces te das cuenta que aquí tampoco estamos tan mal.

D. : ¿Y por qué no se produce en otros deportes?

B.S. : Cada deporte tiene un tipo de afición. Por ejemplo, el baloncesto es más tranquilo, tú vas al pabellón y casi tienes tu asiento como en un avión. En cambio al fútbol van muchas más personas, los estadios son enormes, hay muchos sitios por donde moverte. Pero bueno, también he visto los pabellones de baloncesto en Atenas y eso es otro mundo. Aunque es verdad que las aficiones lo suelen llevar bien. Estas cosas dependen de la gente, del modelo de aficionado, del tipo de público. Fíjate en el respeto que hay en el tenis, el silencio... En fútbol esto es imposible, es un deporte que mueve mucho y que se mueve mucho.

D. : ¿De qué fútbol ha disfrutado más?

B.S. : Siempre he disfrutado con el fútbol, desde que tenía 14 años hasta ahora. De los entrenamientos y de los partidos, pero sobre todo de hacerlo bien. A mí me gustaba mucho entrenar con público, para motivarme y hacer cosas buenas, cada vez más difíciles.

D. : Para terminar, ¿cuál es el partido que todavía tiene grabado?

B.S. : La verdad es que tengo varios. Pero recuerdo muchísimo la final de la Copa del Rey con el Atlético de Madrid, en el Bernabéu, en el año 92, contra el Real Madrid. No sólo por meter uno de los dos goles (el otro fue de Futre, ganamos 2-0), sino por toda la emoción del momento.


LA DIFÍCIL RELACIÓN CON LOS MEDIOS

D : ¿Por qué es tan complicada la relación con los medios de comunicación?

B.S. : Porque pensamos de otra manera. Nosotros tenemos mucha responsabilidad, tenemos informaciones que los medios no tienen. Entonces, si los medios no tienen conocimiento de muchas cosas, pues tampoco tienen mucha capacidad de opinar. Falta profundizar, y de hecho cuando estás más tiempo con un periodista, y hablas más en profundidad, te reconoce “pues tenías razón”, eso es lo que pasa.

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    13 de junio de 2008 17:58, por Megatrix

    La verdad es que me sorprendió encontrar una entrevista a Schuster en un periódico como Diagonal, y no sé si para bien o para mal, aunque también es cierto que me entretuvo, que al fin y al cabo es de lo que se trata. Aupa DIAGONAL!