Al calor de las reuniones preparatorias de las iniciativas y movilizaciones contra la Guerra del Golfo, que se desarrollaron en Gasteiz desde mediados de 1990, diversas personas que compartíamos un mismo análisis y preocupación fuimos entrando en contacto. Nos parecía que la mejor forma de oponerse a las guerras pasaba por denunciar y hacer frente a nuestras implicaciones en ellas